Después de sufrir duras críticas por arruinar la Navidad, el niño más rico del mundo desearía no haber nacido. Desafortunadamente, una máquina de los deseos inventada por el profesor Keenbean recoge su deseo y lo convierte en realidad. Ahora Richie se encuentra en un mundo paralelo, en el que su única esperanza es hallar al profesor para que le devuelva a casa.