Tandy Bowen y Tyrone Johnson eran dos chicos que habían huido de casa. Fueron secuestrados junto con otros jóvenes y usados como conejillos de indias de una potente nueva droga, por un grupo de traficantes liderada por Cabello de Plata, que les dio sus poderes: a Tyrone lo envolvió la oscuridad y Tandy recibió el don de la luz. Con sus poderes, prometieron proteger a la gente de las drogas y se convirtieron en los vigilantes conocidos como Cloak and Dagger.