Avisados sobre la venta de un virus mortal por parte de unos bioterroristas, los agentes del CNI llegan al lugar del intercambio donde se encuentran un cadáver desfigurado y un chihuahua. Tras analizar las extrañas circunstancias que envuelven el crimen, llegan a la conclusión de que el perro es el portador del virus. El chihuahua escapa por los conductos de ventilación tras morder a Rita y Povedilla. Incapaces de recuperarlo, se ponen en contacto con Curtis, su antiguo compañero que ahora es el famoso presentador de un programa de televisión sobre animales.